En 1993 Fevefútbol prefirió equiparse con una manufacturera local, y Forte diseño el recordado uniforme rojizo con la bandera venezolana a un lado, en una cinta vertical del lazo izquierdo. La primera medida de Pedro Chillida como presidente fue la de llamar a un entrenador que era perfecto conocedor del club, Benito Díaz, que se encontraba en Francia entrenando al Girondins de Burdeos.